viernes, 9 de diciembre de 2016

NOTICIAS - La explanada de la Estación del Norte y la calle Matheu, dos cuentas pendientes


Los 14 distritos de Zaragoza están inmersos desde noviembre en la primera fase de puesta en marcha de los presupuestos participativos proyectados por el Ayuntamiento. De la partida de 5 millones de euros que se repartirá entre ellos, un total de 479.935 han sido asignados a la Junta Municipal El Rabal, cuyos vecinos y colectivos tendrán la oportunidad, como en el resto de distritos urbanos de la ciudad, de presentar sus propuestas de inversión a partir del próximo 12 de diciembre.

Algunos de ellos ya se han puesto manos a la obra. Es el caso de la asociación vecinal Arrabal Tío Jorge, que tiene claras cuáles son las necesidades ahora más apremiantes en el barrio. “Estamos a la expectativa de ver cómo se desarrollan estos presupuestos y esperando los diferentes procesos, pero hemos querido anticiparnos y, tras estudiar las reivindicaciones del entorno, hemos definido las que entendemos que son más urgentes”, cuenta su presidente Rafael Tejedor.

Aunque están realizando distintas valoraciones en materia económica y sobre la oportunidad de petición de estas actuaciones, las dos principales propuestas que plantean en el colectivo son la intervención en la explanada situada junto al Centro Cívico Estación del Norte y la reforma de la calle José María Matheu.

En el caso del área colindante a la antigua estación, demandarían su asfaltado y la dotación de una acometida eléctrica con el objetivo de convertirla en un lugar utilizable para eventos como ferias, mercadillos o diferentes actividades de ocio y culturales. “Se trata del gran espacio de equipamiento público del distrito y es necesario acondicionar su terreno para darle usos. Aunque es una obra de envergadura, creemos que es imprescindible”, apuntan desde la AVV.

Para Rafael Tejedor, esa amplia explanada, “de tierra, con cuatro maceteros, cuatro bancos y cinco torres de iluminación” se ha convertido en un ‘pipican’ y ha sido víctima de la dejadez desde el año 2007, cuando se intervino en ella para alisar el terreno y marcar los bordillos: “Simplemente se ha dispuesto tierra para atajar el problema de los charcos. El resto han sido todo ideas sobre el papel”. El representante vecinal añade que cada vez que llueve, este lugar se convierte en un “inmenso charquero”, algo que limita la posibilidad de realizar actividades en él. “Si se asfalta y se dota de un par de puntos de luz, puede convertirse en un espacio aprovechable hasta que se pueda desarrollar el proyecto que ganó el concurso de ideas convocado por Zaragoza Vivienda en 2011”, apunta.

Mientras, para la calle José María Matheu estudian solicitar una ampliación de las aceras que facilite la accesibilidad y el tránsito de personas que hacen uso de sillas de ruedas o carros de paseo. “Es una vía que posee 60 centímetros de acera peraltada, totalmente intransitable para personas con dificultades de movilidad”, detallan desde la agrupación del Arrabal. Su solución pasaría por suprimir una de las líneas de aparcamiento de la calle para aumentar así la superficie del pavimento destinada a los viandantes.

Fuente: Periódico Heraldo de Aragón