miércoles, 27 de abril de 2011

NOTICIAS-El gestor de infraestructuras portugués reducirá su plantilla y cerrará líneas.

Refer, el gestor portugués de infraestructuras, reducirá su plantilla actual de 3.500 trabajadores en unos quinientos en los próximos dos años, en el marco del denominado plan plurianual de promoción y eficiencia al que la empresa se ha comprometido, ante la grave situación económica actual del país.

La fórmula que Refer utilizará para reducir su plantilla todavía está por definir, así como el monto de las posibles indemnizaciones, extremos que deberán ser determinados por el gobierno. En cuanto a las categorías profesionales afectadas, no habrá excepciones, y entrarán en el plan trabajadores de todas las cualificaciones, y de todas las áreas de la empresa, conservación, explotación, ingeniería e inversión.

Equilibrio económico.

Refer tiene en la actualidad un pasivo de seis millones de euros y una deuda cuyo servicio alcanza los 1.800 millones de euros anuales, ante lo que el plan de eficiencia exigirá cerrar líneas, congelar inversiones y reducir los costes de explotación y conservación de la red.

Asimismo, por primera vez Refer ha llegado a un acuerdo con el gobierno para contractualizar sus obligaciones de servicio público de gestión de la red ferroviaria y las compensaciones financieras a recibir, con el objetivo de alcanzar el equilibrio económico en 2019.

Cierre de líneas.

A las líneas que se cerraron provisionalmente hace dos años y que no se volverán a abrir, se unirán previsiblemente el Ramal de Cáceres, entre Torre das Vargens y Marvão, el tramo Beja-Ourique y la línea del Vouga entre Albergaria-a-Velha y Águeda.

El plan prevé la “reducción de la capacidad o el cierre de los tramos de la red en los que se verifique que los costes de su utilización exceden claramente los beneficios sociales y económicos que generan”.

Cáceres.

En el caso del ramal de Cáceres ya se eliminó este año el servicio de trenes regionales y sólo circula por él, el Tren-Hotel Talgo Lisboa-Madrid, que podría, en el futuro, desviarse por Elvas o por la línea de Beira Alta.

En cuanto al proyecto de alta velocidad, el tribunal de cuentas portugués deberá dar el visto bueno para que las obras continúen, y el gobierno portugués deberá justificar al Fondo Monetario Internacional que los costes de las indemnizaciones por el incumplimiento de los contratos de construcción del tramo Poceirão-Caia no compensarían la anulación de esos compromisos.

Fuente: Vía Libre (www.vialibre-ffe.com)